Generando puentes con el Club Flores Sur
Escrito por La Colectiva Radio el 23 de enero de 2024
“Libremente en la Radio” es un espacio que busca difundir las acciones positivas que la gente común realiza todos los días. Un mar de voluntades, que con pequeños y grandes gestos construyen un presente digno y valiente. Este programa emitido por La Colectiva Radio esta conducido por Silvana Pécora y Eli Rodríguez Palancas y en operación técnica Graciela Gurvitz.
En esta oportunidad se eligió abordar la idea de la ciudad para sus habitantes. Repensar las políticas urbanas necesarias para recuperar nuestro espacio, apropiarnos de la ciudad, de quienes somos y de quienes queremos ser y cómo queremos vivir. Para esto se entrevistó a Ariel Palombi, sociólogo, especialista en desarrollo local y docente. Trabaja en la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires, es escritor de varios artículos sobre transformaciones urbanas, lleva adelante proyectos mutuales y cooperativos en el barrio porteño de Flores y es el fundador del «Club Flores Sur» y del bar «Lo de Eva».
Ariel nos cuenta que se dedicó más específicamente a la sociología urbana, que tiene muchos campos de acción y estudio con el urbanismo y la planificación de ciudades. Esto implica desnaturalizar las condiciones de vida, las formas en las que nos reproducimos, los ámbitos en los que vivimos y cómo es nuestro hábitat. Se trabaja para poder problematizar y repensar las ciudades, pero también nuestro día a día, nuestra construcción cotidiana, que es una construcción social y como tal la podemos transformarla.
En relación a las politicas públicas, dice: «Hace muchísimos años que no responden a las necesidades de la mayoría, a las necesidades de un montón de personas que creemos en otro tipo de ciudad, que queremos una ciudad más sensible, una ciudad más diversa, una ciudad más inclusiva». Pone el foco en que la Ciudad de Buenos Aires tiene una planificación que responde a ciertos intereses, como el negocio y las corporaciones inmobiliarias, quienes tienen al Estado como un gran aliado y un facilitador de estos negocios. Se construyen torres indiscriminadamente, poniendo en riesgo los servicios en los alrededores y la identidad de los barrios. Nos cuenta que hoy se ha podido poner en cuestión el Código Urbanístico de la Ciudad, visibilizando su mal desarrollo y mostrando que el caos en el que vivimos fundamentalmente está en relación con el avance de la construcción que soporta CABA hace años. Dice: «por un lado un avance indiscriminado de la corporación inmobiliaria y por otro lado una ciudad que tiene muchísimos recursos y que los malgastan y los usan para hacer macetitas como acá enfrente» «En mi trabajo en la Legislatura hace muchos años que reviso licitaciones, presupuestos y veo lo que salen esas obras, porque no es que la macetita salió 5000 pesos, no. Quizás diez macetitas terminan saliendo 50 millones de pesos». Y deja bien en claro que ahí también esta la corrupción.
Ariel nos cuenta que el proyecto arranca después del 2001, cuando un grupo de chicos del barrio que formaban parte de la asamblea vecinal llamada «Asamblea de Flores Sur» se juntaron con compañeros y compañeras más grandes y con mayor experiencia con el lema «Que se vayan todos». Con el tiempo se iba agotando la capacidad de encuentros y deciden sostener el tipo de organización en el «Centro Social y Cultural» en 2006/2007 donde trabajaban haciendo pastas artesanales, emprendimientos culturales e intervenciones en la vía pública dándole lugar a toda la emergencia de la época. En 2009 se fundó la «Mutual Centro Cultural Flores Sur» donde ya cumplieron 14 años, tienen dos sedes y 500 socios.
Nos cuenta que hay una gran diferencia de inversión por parte del Estado entre el norte y el sur de la Ciudad de Buenos Aires, pero por otro lado dice que lo importante es lo que esperamos de la ciudad, no si se pone mas linda y mas rica, sinó si es una ciudad integrada, solidaria, sin desigualdad y sin violencia. «La desigualdad es violencia», afirma y habla de que en la ciudad hay una sociedad poco integrada que no conoce todos los barrios, porque rige cierto alejamiento, fragmentación y diferenciación.
«Desde nuestra mutual fomentamos mucho que haya diversidad, nos interesa que vengan los sectores populares del Bajo Flores o de los edificios, pero también nos interesa que venga la gente de los pasajes, la gente del centro de Flores, porque nos parece que esa diversidad está buena, lo que se genera está bueno, el diálogo entre un chico de un colegio privado, que quizás va con todos chicos muy parecidos a él, con un pibe que viene de un barrio popular…. les abre la cabeza», relata Ariel y recalca que lo importante es una sociedad en la que podamos convivir, dialogar y aprender. Lo mas interesante para lograr un cambio social es la construcción colectiva y participativa con multiplicidad de organizaciones, radios comunitarias, clubes, mutuales, comedores, centros culturales, centros sociales, etc. y aunque quizás hoy no estén del todo articulados ya tienen un gran potencial como por ejemplo en el caso de Costa Salguero, donde se hizo la audiencia pública más grande de la Ciudad de Buenos Aires.
Ariel nos conto sobre la ley de alquileres y la falta de recurso habitacional, donde el derecho a la vivienda pasó a ser un negocio y un ahorro de quienes tienen dólares. No hay políticas que protejan a los habitantes y sí las hay para los empresarios. Señala que en países como Berlín, Barcelona o Nueva York lo mas importante es la política estatal habitacional y en esta última ciudad suspendieron desde el Estado los alquileres temporarios.
Actualmente hay una gran lucha de los vecinos y vecinas contra el Código Urbanístico que le permite a las grandes inmobiliarias y empresas construir de forma arbitraria destrozando la identidad de los barrios y la calidad de vida de los y las porteñas. Lo importante es colectivizar las luchas para lograr un cambio en la ciudad que sea verdaderamente eficiente para todos y todas. Ariel dice: «El problema de la vivienda es un problema heterogéneo, muy heterogéneo, hay muchas situaciones particulares y requiere políticas heterogéneas Por ejemplo, nosotros en la legislatura armamos una política macro de vivienda que se presentó en 2021 y tenía, creo que eran, 16 instrumentos distintos para abordar la problemática. Porque no es nada más el crédito hipotecario, el crédito hipotecario te diría que hoy en día te sirve casi de nada, te sirve muy poco… porque es de otra época de la Argentina, de otro momento. Igual tiene que estar, pero vos tenés después un montón de herramientas distintas que aplicadas en bloque, no una hoy y otra mañana, todas juntas, en donde también se pueda diferenciar, porque quizá tenes desarrolladores pequeños, arquitectos que construyen tres o cuatro PH, y que los tratan igual desde el gobierno nacional que a las grandes desarrolladoras que hicieron la torre de acá la esquina o las de Puerto Madero. Entonces digo, hay todo un desfasaje de que todo es lo mismo».
Hoy desde el Gobierno de la Ciudad solo dan algunos subsidios habitacionales para que se pueda alquilar, como algo residual, pero lo importante es poder tener una vivienda para toda la población. Dice: «para el hijo de la clase media, para el pibe que vive con la madre y se quiere independizar, para los sectores populares, para los barrios populares. Digo tener una política variada, obviamente para el tipo que puede acceder desde el mercado que acceda por el mercado, pero para el resto hay un sinfín de de instrumentos». Agrega: «No hay un Estado activo para la gente, hay un Estado activo para las inmobiliarias» «Trabajan para que especule el capital inmobiliario» «El Estado trabaja en dirección contraria».
Cómo funciona la Mutual
Ariel nos cuenta que las personas se asocian a la Mutual para satisfacer las necesidades que puedan surgir de manera colectiva. Tienen actividades deportivas y culturales. Hay desde fútbol, patín y hockey hasta taekwondo, gimnasia Esparta, boxeo y futsal. Una vez por mes se hace una peña, que se llama la «Rupenia» . Hay talleres de danzas folclóricas y de teatro comunitario.
En las sedes también funcionan algunos programas del Estado, como por ejemplo «programa adolescencia», «programa Puentes Escolares» y los programas del Gobierno Nacional de la Secretaría Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia.
Tienen una nueva iniciativa de una proveeduría de alimentos. También turismo social, donde han articulado con el Ministerio de Turismo y se hicieron algunos viajes al complejo de Chapadmalal junto a otras organizaciones. También se están armando salidas a una quinta cerca de Cañuelas donde se ofrece recreación en el verano.
Asimismo están llevando adelante proyectos que no solo apunten a lo deportivo, recreativo y artístico, sinó a buscar herramientas que puedan trazar las distintas necesidades de todas las familias. «Estamos en ese camino y bueno, vamos caminando y generando puentes» finaliza diciendo Ariel.
(Fotografías tomadas de la red social Instagram del Club Flores Sur)