Fuego Eterno en la plazoleta Raymundo Gleyzer
Escrito por La Colectiva Radio el 24 de marzo de 2022
En La Colectiva Radio realizamos el sábado 19 de marzo un homenaje a Raymundo Gleyzer en la plazoleta que lleva su nombre en el barrio de La Paternal. Para la actividad, de cara a cumplirse 46 años del golpe genocida, elegimos el documental de Cynthia Sabat, Fuego Eterno y nos acompañaron la directora, así como el compositor de la música, Guchi Fraiman.
Tras la proyección hubo una interesante charla entre el público y la directora.
La película se centra en relatos y recuerdos de la compañera de Raymundo, Juana Sapire y su hijo Diego y está compuesta por imágenes filmadas en Nueva York, donde residen ambos desde que lograron escapar de la última dictadura cívico-militar-eclesiástica y en momentos icónicos de Juana en Buenos Aires durante el juicio por la desaparición de Gleyzer.
Entrevista a Cynthia Sabat
Sabat resaltó aspectos de la vida de Raymundo Gleyzer y la vigencia de su filmografía, trabajos realizados entre la década de 1960 y la primera mitad de los setentas.
Luego se abrió el juego de pregunta-respuesta con el público presente, un momento que permitió recrear otros aspectos de la película y de la vida de Raymundo Gleyzer y también mostró la diversidad de pensamiento entre vecinos y vecinas que se acercaron a presenciar la proyección.
Durante ese intercambio, Cynthia Sabat destacó su relación con Diego y Juana y cómo a partir de esa relación pudo contar esa suerte de actualidad del pasado: “Juana sigue soñando con él, sigue pensando que va a entrar por la puerta. Diego me contaba que cuando nació su primer hijo se puso a llorar a mares pensando “Por qué no lo tengo a mi papá para que me de un abrazo ahora”. Entonces, eso me importaba mucho contar en esta película, que lo que mucha gente piensa que es pasado, es presente y que esas personas, además de no haber podido hacer el duelo porque jamás se encontró el cuerpo de Raymundo ni se reconstruyó su último día, viven con una herida abierta. Y eso es lo que quizá la gente no sabe y esta herida es también social”.
La actividad culminó con la lectura de las respuestas anónimas sobre qué es la memoria escritas para el buzón colectivo de la memoria que circuló entre los y las presentes.
Y con el necesario grito de 30.000 compañeros desaparecidos…presentes. Ahora y siempre.