Ciudad: Talleres barriales y programas culturales en lucha

Las trabajadoras y trabajadores de la Dirección General de Promoción del Libro, Bibliotecas y la Cultura perteneciente al Gobierno de La Ciudad de Buenos Aires, recibieron de forma imprevista e inconsulta la notificación del recorte de horas cátedra, lo que implica el cierre de muchísimos talleres gratuitos, la finalización de distintos programas culturales barriales, la cancelación de la modalidad virtual de cursada y el despido de una gran cantidad de docentes.

Este viernes más de 500 docentes, coordinadores y estudiantes realizaron una Asamblea en la puerta del Ministerio de Cultura de Ciudad. Si bien fueron recibidos por las autoridades, quienes se comprometieron a brindar una solución adecuada al reclamo, seguirán en estado de alerta y movilización hasta que dicho compromiso se haga efectivo.

Cabe destacar que este sector desde hace años viene reclamando mejoras en las condiciones laborales. Tienen contrataciones precarias, no cobran antigüedad y cada año dan de baja todo el plantel docente aún siendo de planta transitoria. En lo que refiere a sus sueldos, cobran la mitad que un docente de otros sectores del Ministerio de Cultura y menos de la mitad respecto a un docente de Educación no formal. Por otro lado, hace 20 años que trabajan sin ningún tipo de insumos y materiales, aún durante la pandemia.

Actualmente el gobierno del Gobernador Jorge Macri suma a esta situación más recorte presupuestario y precarización laboral.

Para dar mas detalles de esta situación, La Colectiva Radio conversó con Sol Copley, delegada general de la Dirección General de Promoción del Libro, Bibliotecas y la Cultura, integrante del Consejo directivo de ATE Capital y docente de flamenco y de historia, quien relata que: “Nos recortaron casi un 20% del presupuesto, en particular de las horas cátedra que le pertenecen aproximadamente a 1.000 docentes que trabajamos en más de 40 espacios donde dictamos diferentes talleres artísticos y culturales”. Dice que son cientos y cientos los talleres de diversas disciplinas que se encuentran perjudicados, entre los cuales figuran artes escénicas y artes plástica y son casi el 100% de los y las docentes quienes se verán afectados por el ajuste. Agrega: “Ya veníamos reclamando hace un montón que la hora cátedra está completamente desactualizada. Nosotros cobramos la mitad que un docente de educación con la misma cantidad de antigüedad y con la misma cantidad de horas cátedra. Y menos de la mitad de lo que cobran los docentes de educación no formal, que hacen un trabajo igual al nuestro y cobran el doble porque se rigen por la paritaria de educación, en cambio nosotros nos regimos por la paritaria de la carrera administrativa de ciudad, que no tiene nada que ver con nuestra tarea”.

La planta de docentes correspondiente a la Dirección de Promoción del Libro, Bibliotecas y la Cultura fue creada en el año 2005. Es una planta transitoria que, despues de casi 20 años, sigue siendo transitoria. Si bien se ha presentado a la legislatura un proyecto para regular y estabilizar la situación del sector, aún no es tratado, debido a que desde el Gobierno de la Ciudad se han negado sistemáticamente a hacerlo. Sol dice: “De esta forma quedamos a merced de cualquier cambio de gestión, entre comillas, porque en realidad es la misma gestión. Hacen lo que quieren con nuestras horas cátedra y nuestro trabajo. También se dieron de baja docentes de manera completamente arbitraria. Es una gestión nueva que no tiene la menor idea de cómo funcionan los espacios, no saben cual es nuestro trabajo, pero optaron por recortarnos a nosotros”. Sol agrega que no hay un proyecto cultural artístico de diseño detrás de este ajuste. Si bien los recortes de Jorge Macri son en todas las direcciones, en este caso es sobre el hilo más fino, es decir los y las docentes que ya vienen con sueldos totalmente precarizados, en un contexto actual de crisis económica donde el trasporte público para acceder a los espacios laborales es excesivamente caro. “$27.000 cobra alguien por venir a dar un taller, ni siquiera 27, porque en mano con los descuentos le queda $20.000 y si tiene que pagar el bondi ya no le alcanza la plata”, afirma Sol. Por otro lado cuenta que tampoco tienen insumos para trabajar, como equipos de música, colchonetas, etc. Dichos materiales se obtienen con el aporte del del propio alumnado. Es decir que son talleres gratuitos, pero el Gobierno no otorga los materiales necesarios.

Finalmente comenta lo siguiente respecto al plantel docente: “Ahora quieren que en lugar de que nuestra planta sea anual, sea trimestral. Es decir que quieren que la renovación docente sea cada tres meses, cuando los talleres son anuales. Encima que ya cobramos con atraso, esto demora todo aún más. Dicen que vienen a hacer más eficientes las cosas y están triplicando el trabajo administrativo sin ningún sentido. Los talleres son anuales, por ende estarían dejando cada tres meses a la gente sin taller, que ya se escribió a principio de año”.

Lo que exigen las y los trabajadores es no solo que no bajen las horas cátedra, sino que además de aumentar su valor aumenten la cantidad de horas “Lo que nosotros queremos es brindar más y mejores disciplinas a los vecinos y vecinas de la Ciudad de Buenos Aires, no empeorar el servicio”.

Desde el comunicado dicen: “No nos están ajustando solamente a lxs trabajadores, están recortando el acceso a la cultura de miles de vecinxs que año a año disfrutan de aprender una disciplina artística y cultural, de compartir un espacio comunitario, barrial tan imprescindible en estos tiempos de tanta incertidumbre sumada a la crisis económica y política que está atravesando nuestro país”.

Audio completo de Sol Copley

(Fotografía de portada de Atilio Juan Chiale)