“Al flujo de la historia no se le puede poner diques”

Entrevista a Dora Barrancos(*)

Entre los negacionismos que emergen en los discursos que habilitan Milei y sus allegados y allegadas se encuentra el de las luchas feministas. Niegan el patriarcado, lo identifican como una invento feminista, niegan la violencia de género, entre otros. Cómo son posibles, qué significan, qué hacemos con ellos, son algunas de las preguntas que le trasladamos a Dora Barrancos, Licenciada en Sociología, Doctora en Historia. Investigadora en el CONICET

 

¿Qué significado le asignás a estos negacionismos, que incluso llegan a negar el patriarcado?

“De lo que se trata el espejo en el que se mira el negacionismo es la justificación del orden. Desde mi perspectiva, la semiótica es en realidad un acuerdo completo con todas las formas habidas. Negacionismo del genocidio: justificación, autorización. Negacionismo del patriarcado ¿qué es? Justificación de su existencia. Negacionismo de la violencia de género quiere decir que en realidad todo el mundo está expuesto a violencia y no hay ninguna condición particular sufrida por las mujeres. Entonces, los negacionismos deben ser vistos en sus propuestas positivas justificatorias de la dominación, de las formas brutales de la violencia. Esto es lo que quiere decir”.

Puntualmente respecto a los avances de los feminismos ¿cuánto pueden influir estos negacionismos,  cuánto pueden impregnar?

Creo que a la historia no le puedes poner barreras, al flujo de la historia no se le puede poner diques.  Felizmente hemos ido lejos en una creación, yo diría bastante importante, de imaginarios sociales que tienen que ver con el darse cuenta, la reflexión, la admisibilidad de lo que es las formas abyectas del patriarcado y las no tan abyectas. Hay también un dispositivo notablemente renovado en la mayoría de las mujeres, la mayoría enorme de las mujeres, se digan o no feministas. Estas formulaciones que son muy propias de las extremas derechas planetarias, que todas baten la misma tecla, tocan la misma música.”

Barrancos eligió al gobierno de Viktor Orban, quien visitó la Argentina para la asunción de Javier Milei, como un ejemplo extremo de donde puede llegar la ultra derecha en cuestión de vulneración de derechos, comenzando por los de los trabajadores y las trabajadoras, pero abarcando a toda la sociedad: “La última reforma constitucional de Hungría acabó con todas las prerrogativas de las mujeres, salvo la del voto. No se admite en Hungría cualquier consideración respecto a la brecha salarial. La brecha salarial es un dispositivo legal, está autorizada jurídicamente” Luego aclaró que “Felizmente, nuestra latitud, América Latina en este momento, hay un reverbero enorme en torno de los derechos de las mujeres, las disidencias, los llamados derechos personalísimos. Creo muy difícil que la gente vuelva a admitir la servidumbre voluntaria”

Estas mismas mujeres que niegan los feminismos, que llegan a cargos de decisión, tanto en el gobierno de Macri como en el actual de Milei ¿No es que llegan a estos cargos por ese trabajo, esa lucha feminista que hay detrás?

“Pero par ellas no es admisible. Hay nombres importantes en el mundo, además de Tatcher, pero a Tatcher le costó horrores ascender en la vida y en la vida política. Tatcher es una figuración empírica e incontestable de lo que acabás de decir. Ella era una muchacha de clase media y aunque no le correspondía por clase, se sintió completamente imantada por la clase “superior”. Vivió toda su vida dentro del sector conservador y fueron muy ominosas las circunstancias que vivió. Pero ella nunca lo tomó que se podía revelar como una cuestión idiosincrática del género (…) Son mujeres conformadas patriarcalmente, ahí hay un triunfo incontestable del orden patriarcal que les ha dado una subjetividad muy condicionada y que no están dispuestas a revisar de modo alguno.

¿Qué balance hacés de estos cuatro años del Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad?

“Fueron años intensos, difíciles. Se imaginan ustedes que el esfuerzo es considerable cuando se arranca de cero, durante algunos meses carecía de presupuesto porque no estaba previsto. Pero tuvo muy buena receptividad dentro del elenco gubernamental.” La referente feminista se refirió a las enormes dificultades que hubo que vencer, pero a la vez destacó la “Enorme sensibilidad general de la gobernanza. Yo voy a reivindicar la particular sensibilidad para todas las políticas de género que exhibió Alberto Fernández. Si no hubiera sido por su determinación, desde luego que muy empujada por mucha gente que estábamos ahí en alguna función, de haber enviado el proyecto de ley IVE al Congreso.” Realzó también el accionar de la que fuera ministra en el comienzo del Ministerio, Elizabeth Gómez Alcorta enumerando alguno de los programas que echó a andar, como el programa acompañar. “El Ministerio, con sus cuatro años luce muy bien (…) y lamentamos como una herida muy sangrante la defunción del Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidades, el que ha sido extinto sin el menor acto protocolar ni administrativo.”

¿Qué nos recomendás para el tiempo que viene?

Como soy una señora de mucha edad me voy a permitir dar algún consejo, pero no es para rajatabla. Primero, una gran capacidad de análisis sobre lo que ocurrió. La segunda cuestión: una gran capacidad estratégica de resistencia. He venido diciendo que no es cuestión de descontrolarnos. Es cuestión de pensar y reflexionar el lugar de ejercicio activo, muscular y de pensamiento de oposición. Tiene que ser pensado, reflexionado, activado de conjunto. Tengo un pronóstico muy trágico sobre los acontecimientos que nos aguardan ahí no más, en cuanto ya sea patética la expresión de estas políticas económicas, que ya las hemos visto, y como dice el dicho brasileño que es tan notable “ah, esta película ya la vi y la que muere al final soy yo”. Pero no vamos a morir, hay una muestra agonística en el dicho que refiere a que esta película es un desaguisado”

Entonces, reflexión sí ¿silenciarnos?

Nunca. Pero el colectivo tiene que manifestarse de manera estratégica. Y sobre todo no perder la alegría a pesar de lo trágico de todo, porque he ahí nuestro mayor triunfo y me despido con un lexema que me es muy caro: la luz siempre brilla en las tinieblas”

 

(*) Licenciada en Sociología, Doctora en Historia. Actualmente se desempeña como Investigadora Principal del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) y es Profesora Consulta de la Facultad de Ciencias Sociales – UBA.