Absuelto no es inocente

En 2011, Hernán González Rizzi fue denunciado por un abuso aberrante en perjuicio de su propia hija Luna, de 9 años.
El pasado 21 de noviembre, luego de 11 años de aquella denuncia y trascurridos más de 4 meses de juicio, el abusador fue declarado absuelto.
La noticia cayó como un balde de agua fría en la gran cantidad de personas que estuvieron acompañando a Luna, ya mayor de edad, y a Yamila Corin, su madre protectora y quien descubrió los signos de abuso de su entonces pareja y padre de la niña.
El fiscal había solicitado 15 años por el delito de abuso sexual agravado contra su hija, pero los jueces Virginia Sansone, Adrián Martín y María Elisa Gaet resolvieron, en un fallo patriarcal, a favor del hombre acusado.
Pero esa no era la única sorpresa que este tribunal tenia para mostrar, ya que este miércoles 29 se conocieron los argumentos del fallo, y dicen, en un escrito de mas de 1.000 (mil) paginas, que al acusado le otorgan el «Beneficio de la duda».
¿Duda? ¿De que duda el tribunal? ¿duda del relato de una niña de 9 años, que ahora con 20 sigue diciendo, y cada vez comprendiendo en mas detalle, que su progenitor la abusó?
¿Dudan Sansone, Martín y Gaet de la cantidad de peritos, psicólogas y testigos que pasaron (y fueron algunos vilmente tratados por la defensa) por las interminables audiencias del juicio?
¿Dudan de una madre protectora, feminista, militante, que tuvo que pasar por una de las peores experiencias familiares posibles y denunciar a su ex compañero y progenitor de su hija por abuso sexual?
Sí, parece que sí, que dudan de todo eso. Pero hay que estar muy enterrado en el barro patriarcal para no tener la vergüenza de dudar de tantas pruebas.
Hasta el fiscal, que analizó las mismas presentaciones, que vio a los mismos testigos, que escuchó los mismos relatos, no tenia dudas de pedir 15 años por tratarse de un abuso sexual gravemente ultrajante agravado por el vínculo filial preexistente.
El pasado martes 21, la movilización a favor de Luna que se encontraba en la puerta del Tribunal Oral en lo Criminal N° 15 de la Ciudad de Buenos Aires, sobre Lavalle al 1100, repudió el fallo y una de las abogadas querellantes hablo de «algo inentendible».
Yama Corin, madre de Luna, denunciante e integrante de Agrupación Mundanas, tuvo palabras de agradecimiento a quienes se acercaron durante tanto tiempo a dar su apoyo en cada audiencia y en cada dilación de los abogados defensores y definió esa movilización «un compromiso en la lucha contra el abuso sexual en la infancia, más allá del caso de Luna».
También se expresó la Madre de Plaza de Mayo Nora Cortiñas, que estuvo acompañando la causa en todo momento, quien aseguró: «Vamos a ir hasta el final. Tiene que ir preso».
Hoy no bajamos los brazos, sabemos que Rizzi tiene que estar en la cárcel.
¡Por Luna y por todas las infancias!

(Foto de portada tomada de las redes sociales de Justicia para Luna)