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Ciencia de la A a la Z: festival en defensa de la ciencia argentina

Escrito por el 11 de abril de 2025

Este sábado 12 de abril, entre las 13 y las 20 horas, la comunidad científica volverá a salir a la calle con una jornada de divulgación y lucha destinada a toda la familia. El festival Ciencia de la A a la Z será en Parque Rivadavia, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, y habrá un conjunto de charlas, experimentos, stands, sorteos y música.

Este es el segundo festival federal en defensa de la ciencia y la tecnología, ya que el año pasado se llevó a cabo el Festival Elijo Crecer. Habrá 27 mini charlas, una por cada letra del abecedario, que van a estar divididas en tres tandas y contará con investigadores como Andrea Gamarnik, Diego Golombek, Juliana Cassataro y Alberto Kornblihtt.

Además, entre tandas de charlas habrá un micrófono abierto destinado a representantes de otros sectores de lucha, como referentes de jubilados, de docentes universitarios y de trabajadores de la salud.

Entrevistamos a dos integrantes del equipo organizador del festival, Claudio Cormick, doctor en Filosofía e investigador del CONICET, y Valeria Edelsztein, doctora en Química e investigadora del CONICET, para que nos cuenten cómo es la situación actual que está atravesando la comunidad científica argentina y como surgió la idea de hacer este festival.

 

¿Cuál es la situación actual de los y las trabajadoras del sector científico y tecnológico de nuestro país?

Claudio: Sufrimos el 30% de pérdida de poder adquisitivo de nuestro salario entre noviembre del 2023 y noviembre del 2024. Ahora debe ser peor todavía porque son números de  hace unos meses. Eso sin duda es una medida expulsiva. Ustedes habrán visto que hay 1300 trabajadores menos en el sistema científico tecnológico desde que gobierna Milei. Se combinan varios factores para expulsarlos. Uno es una política muy consciente de que nuestros salarios aumenten muy por debajo de la inflación. Otro son los despidos abiertos, o sea, gente a la cual no se le renuevan los contratos. La verdad que la no renovación de un contrato de una persona que viene con contratos precarios, pero laburando en eso hace 10, 15 o 20 años, es un despido y lo denunciamos como tal y, por cierto, incluye la responsabilidad, no solamente del gobierno de Milei, sino de quienes permitieron antes que se consolidara esa modalidad de trabajo precario. Y, por otro lado, hay gente que se ve forzada a renunciar porque, por ejemplo, pasa de tener contratos anuales a contratos trimestrales, que se suman además al atraso de los salarios de los compañeros administrativos. Por último, una cuarta pata de todo este gran mecanismo expulsivo es el tema de los 845 compañeros y compañeras que fueron designados para entrar en la carrera de investigación en el Conicet en el 2023, de los cuales nunca se les dio de alta. O sea, el Estado les está diciendo, ya de una manera no demasiado sutil, váyanse a laburar de otra cosa o de lo mismo, pero a otro país.

Valeria: Hay que entender cómo funciona el financiamiento de la ciencia y la tecnología en nuestro país, hay mucha plata que viene, por ejemplo, del Banco Interamericano de desarrollo (BID). Eso lo ejecutaba la agencia de promoción científica y técnica, esa plata llegó, es plata que el BID ya puso y que nunca fue ejecutada. Entonces, hay un montón de proyectos que ya fueron evaluados de manera muy rigurosa, que tenían asignado ese financiamiento y que no lo están recibiendo y eso obviamente tiene un impacto muy profundo en cómo se desarrolla la ciencia y la tecnología en el país, porque sin esa plata, sin ese financiamiento no funciona. Por ejemplo, comprar reactivos, conseguir insumos, mantener los equipos en funcionamiento. La plata termina saliendo muchas veces del bolsillo de investigadores e investigadoras.

Hay algo bastante irónico en este gobierno, que todo el tiempo habla acerca de que le importan las ciencias que llaman duras, como las ciencias exactas y naturales, o las de experimentación, como la biotecnología, el desarrollo de energía nuclear y demás. Todas esas son disciplinas que requieren un financiamiento mucho mayor, porque los insumos se compran en el exterior, porque hay que pagarlos en dólares. Las personas que trabajan en sociales, en humanidades, nos arreglamos con una computadora, nos arreglamos con cosas que no son tan caras. Entonces, pese a que dicen que quieren defender esa parte del sistema científico tecnológico, la realidad es que están perjudicando mucho más a las ciencias exactas y naturales.

¿Cómo surge la idea de hacer este festival?

Claudio: La coyuntura que motivó el festival del del año pasado durante los siguientes meses fue avanzando y profundizando. Entonces, cada dos días decíamos: «Bueno, mantenemos el festival, pensamos en medidas más duras, ¿qué hacemos?» Pero después llegamos a la conclusión de que la única forma de hacer un evento realmente contundente, con el Dream Team de la ciencia argentina, coordinando con siete sectores más, es mantenerlo a lo largo de los meses y hacer un poco de abstracción de la coyuntura más inmediata, porque si no, estás corriendo detrás de un montón de luchas circunstanciales, que son absolutamente indispensables, pero no podés pensar algo en otra escala. 

La caracterización en diciembre pasado fue que la situación era bastante catastrófica, pero al mismo tiempo había bastante desmoralización y bastante desmovilización. Porque la verdad, preferiríamos hacer una toma por tiempo indeterminado del ex Ministerio de Ciencia y Técnica como hicimos en el 2016. Lo cierto es que no se puede, lo cierto es que no dan las fuerzas, hay desmoralización, hay miedo, cosa que es totalmente comprensible. Hay compañeros que dicen: «Mira, a mí me renuevan el contrato cada tres meses, yo no puedo dar la cara en una asamblea, en una toma.» Entonces en ese contexto, a pesar de que nos gustaría  poder hacer acciones más duras, nos gustaría una toma, nos gustaría salir a cortar las avenidas, pero en este momento hay que reagrupar fuerzas, hay que volver a unirse con los compañeros, hay que moralizarnos a nosotros mismos. Entonces resultó en este festival.

Valeria: Por otro lado, además de tratar de juntar a los nuestros, la bajada del festival es “salgamos de las redes y volvamos a las calles”, porque necesitamos poner el cuerpo y necesitamos también encontrarnos en el mundo real. Entendemos que hay muchas luchas, y de hecho el gobierno está convencido de que ganó las redes, de que tiene las redes, pero la verdad es que los derechos se han conquistado en las calles, no en las redes. Entonces, necesitamos también volver sobre esa base fundamental de poder ver a la otra persona. No es lo mismo que esconderse anónimamente detrás de una computadora, como hacen los trols, como hacen los haters, que estar ahí, estar en la calle, saber quiénes son las otras personas y no sentirse solos. Esto nos está pasando a todos, nos está pasando a un montón de sectores, no estamos solos, somos muchos quienes queremos pelearla, quienes estamos dispuestos a pelearla. Entonces también es eso, un llamado a encontrarse y a confluir con otros sectores en una lucha que no sea corporativa. Es darle lugar a que nos encontremos y pensemos nuevas estrategias.

¿Qué tipo de actividades van a realizar en el festival?

Valeria: Ciencia de la A la Z son 27 charlas, una por cada letra del abecedario. Van a estar muchos investigadores e investigadoras, como Alberto Kornblihtt que va a hacer una coreografía, Diego Golombek va a cantar y además va a haber muchos stands de distintas instituciones que se sumaron, como la Facultad de Filosofía y Letras, de Sociales y de Exactas y naturales de la UBA, el Museo de Ciencias Naturales, el Instituto Leloir. También talleres como el Átomo Inquieto, que son talleres de ciencia para chicos y chicas. Es una actividad para toda la familia, para que se acerquen de todas las edades. Además habrá música, va a tocar el Quinteto de los Muertos, una banda de ska instrumental que es espectacular, y vamos a tener muchos sorteos.

Claudio: Hay algo interesante y es que las encuestas, contrariamente a lo que quiere instalar el gobierno, muestran que el Conicet es una de las instituciones más respetadas de la Argentina. Entonces, contrariamente a lo que quieren instalar los trolls, no es cierto que la sociedad no respete nuestro trabajo. Pero, por otro lado, es complicado comunicar muchas veces los avances de la ciencia en general. Incluso vos le preguntás a una persona en la calle y te dice: «Sí, aguante la ciencia argentina, yo los respeto” y cuando le preguntás por un logro de la ciencia argentina del año pasado, probablemente no lo sabe.  Entonces, es importante visibilizar que hay muchas cosas para defender en la ciencia argentina que probablemente el gobierno quiere que ni siquiera creas que existan. Si te quieren convencer de que somos un país de mierda, no vas a sentir que hay mucho por perder. Si en cambio decís, «Che, mirá, Argentina es uno de los únicos 13 países del mundo que pudo desarrollar íntegramente una vacuna contra el COVID. es distinto. En el festival vamos a tener a la persona que lideró ese desarrollo. ¡Los esperamos!


Escuchá la entrevista completa acá:


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